POR GUILLERMO CASTILLO
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La política exterior entre Estados Unidos, Guatemala, El Salvador y Honduras a veces es difícil de entender por la variedad de matices e hilos finos, sin embargo les comparto un análisis de fondo de manera coloquial.
Visualicemos que un hermano mayor hace bullying al hermano menor. El fin del hermano mayor es corrupción e impunidad donde no exista justicia para nadie, excepto por supuesto el mismo hermano mayor que es representado por los políticos del poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial de Honduras, El Salvador y Guatemala.
Por el otro lado visualicemos al hermano menor que es el pueblo hondureño, salvadoreño y guatemalteco que exige justicia, cumplimiento de las leyes, lucha contra la corrupción e impunidad, quiere construir buena gobernanza, seguridad y justicia en lugares de alta migración. El hermano menor solo quiere tener el mismo sistema de justicia que en Estados Unidos donde si un menor llega golpeado, lo descuidan o no asiste a la escuela, se les manda a los padres a la corte. Un sistema donde si existe violencia doméstica, el hombre va a la cárcel y existen mecanismos de acompañamiento para la mujer y niños. Un sistema donde si alguien maneja en estado de influencia (alcohol o drogas), va a la cárcel. Un sistema donde la ley y el orden imperen en cualquier pueblito. Un sistema donde se genere el libre mercado y libre expresión.
Por otro lado tenemos al maestro que enseña a cumplir la ley y tener legalidad que lo compone la Procuraduría de Derechos Humanos, el Ministerio Publico, la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala – CICIG y la Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras – MACCIH. El maestro es la esperanza para tener un sistema de pesos y contrapesos donde se respete los derechos humanos, la constitución, las leyes, la justicia y un Estado de Derecho.
Por ultimo tenemos al Tío SAM que es representado por el Ejecutivo, Legislativo y Judicial de Estados Unidos. A veces Tío SAM se hace el ciego ante la corrupción e impunidad de Honduras, El Salvador y Guatemala. A veces Tío SAM se porta buena gente bajo la Estrategia de Estados Unidos para Centroamérica que fue aprobada por Republicanos y Demócratas desde el Congreso de Estados Unidos. A veces Tío SAM tiene doble discurso y confunde sus señales.
En un resumen corto. El hermano mayor le hace bullying al hermano menor. El hermano menor se queja con el profesor. El profesor le jala las orejas al hermano mayor y le dice que no haga bullying. El hermano mayor que se cree rey se queja con Tío SAM. Tío SAM se hace el ciego y le dice al hermano mayor que siga haciendo bullying al hermano menor. Tío SAM calla al profesor.
Es importante visualizar a la derecha extrema en Estados Unidos como un imán positivo (+) y la derecha extrema en Centroamérica como otro imán positivo (+), que pueden cuajar en ideología, sin embargo en migración son polos opuestos que se repelen, pues la derecha extrema en Centroamérica exporta migrantes y la derecha extrema en Estados Unidos no quiere migrantes por el temor que en 2050 la población hispana represente el 30% de la población norteamericana, sin embargo al final Tío SAM genera la migración hacia su territorio al hacerse el ciego ante la corrupción e impunidad de los Presidentes del triángulo norte de Centroamérica. En otras palabras, el mismo Ejecutivo de Estados Unidos va contra su propia promesa de campaña de detener la migración. ¡Vaya ironías de la vida!
