Betsy Paredes
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Muy pocas veces reconocida , no se habla de la importancia de la mujer migrante que lucha sola en Estados Unidos o cualquier otro país a donde tuvo que partir, muchas dejan esposo e hijos, toda una vida atrás por mejorar la situación económica de su familia, son como guerreras del diario vivir, las ves caminando apresuradas a sus trabajos, esperando el autobús o tren, no importa el clima, un calor imponente, la nieve con viento que congela hasta los huesos, trabajan de niñeras, cocineras, limpiando casas, lavando carros, vendiendo comida o flores en las esquinas, he visto algunas trabajar hasta en construcción con tal de que llegue el sustento hasta aquel caluroso hogar donde sus seres queridos lo reciben con melancolía y agradecimiento, sin saber todo el esfuerzo que a ella le lleva poder cumplir con ese envío, pero ¿saben qué?.
Ella sale día a día con esa fuerza que la caracteriza, ese valor y la fe que la acompaña, se convierte en lo que es para mí una súper héroe, su valor rompió fronteras, abrió camino, no sabe cuándo volverá a ese lugar que tanto extraña ni lo que el destino le depara, duerme sola en una pequeña habitación de sótano donde teje sus sueños cada anochecer, pero persevera, amanece y de nuevo sale a la lucha diaria, aún con temor no dará marcha atrás, pues en su corazón sobra esperanza más que miedo, a esa mujer migrante mi admiración y respeto, un gran ejemplo a seguir, gracias por mostrarnos esa fortaleza que les caracteriza, pues nos alientan a seguir y sentirnos capaces, pensar que si ustedes pudieron, cualquier mujer que emprenda el camino con Dios de su lado lo podrá lograr.