POR REDACCIÓN LA HORA
[email protected]
La comunidad hondureña en Estados Unidos expresó su preocupación luego de que el secretario de Seguridad Nacional, John Kelly, dijo a legisladores hispanos que el programa que suspende las deportaciones de ciertos inmigrantes jóvenes probablemente es ilegal, aunque él personalmente lo respalda, según dijeron representantes de la cámara baja.
Kelly participó en una reunión a puertas cerradas con integrantes de la bancada hispana del Congreso, quienes le presionaron sobre el programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, DACA por sus siglas en inglés. Este plan promulgado por el expresidente Barack Obama suspende las deportaciones a miles de jóvenes inmigrantes que fueron traídos a Estados Unidos de niños de manera ilegal y también les expide un permiso de trabajo.
Los integrantes del Caucus Hispano del Congreso pidieron a Kelly que los actualizara sobre si el gobierno de Trump defendería el programa o no. Dijeron que salieron de la reunión preocupados.
“Personalmente, él lo apoya. Él cree que no durará, de acuerdo con los abogados con los que ha hablado”, dijo el representante Joaquín Castro, demócrata de Texas.
“Algunos de los que estábamos en el salón, legisladores, le preguntamos si es que anunciaría públicamente su postura personal y lo desafiamos a que sea un líder y defienda el DACA. Dijo que lo consideraría”.
Como candidato, Trump prometió “terminar inmediatamente” el DACA. Pero como Presidente, ha dicho que este grupo de inmigrantes no será blanco de deportación. Dijo que su gobierno “no está tras los dreamers, estamos tras los criminales”.
Kelly no habló con reporteros tras la reunión de una hora, pero el portavoz de Seguridad Nacional Dave Lapan confirmó que Kelly tiene dudas sobre la viabilidad legal del programa, en base a conversaciones que ha tenido con abogados dentro y fuera del departamento.
Un grupo de procuradores generales de varios estados también han pedido al gobierno de Trump que cancele el programa.
El procurador estatal de Nuevo México, Héctor Becerra y otros 19 procuradores estatales de todo el país exhortaron al presidente Trump que no cancele el programa que suspende la deportación de ciertos jóvenes inmigrantes sin autorización y les da permiso de trabajo.
Liderados por el procurador general de California, Xavier Becerra, los procuradores dijeron al Presidente en una carta que los 800 mil estudiantes inmigrantes cubiertos bajo el programa DACA han creado un “auge” en las universidades y centros laborales.
“Ellos son nuestros vecinos, nuestros compañeros de trabajo y líderes en las iglesias y la comunidad”, dice la misiva. “Y todos los días ellos están alentando a la economía y comunidades o a nuestros estados”.
El pedido ocurrió después de que los otros 10 procuradores estatales instaran al Presidente a cancelar DACA.
El procurador estatal de Texas Ken Paxton y otras personas amenazaron con enmendar un caso judicial para cuestionar el programa a menos que el gobierno de Trump haga algo para cancelarlo.
Leonso Vela, de Hondureños Unidos en Los Ángeles, dijo que las declaraciones de Kelly sumaron una preocupación más para la comunidad migrante en Estados Unidos.
El activista señaló que ahora, junto a la solicitud de prolongación del Estatus de Protección Temporal (TPS), instarán a las autoridades estadounidenses a continuar con el DACA.
La organización a la que pertenece Vela se ha unido a otras asociaciones civiles de migrantes centroamericanos para realizar distintas actividades a favor de la continuidad del TPS. Esto luego de que el programa fuera extendido solo por seis meses a Haití y el secretario Kelly dijera que quienes estaban bajo ese estatus deberían comenzar a pensar en el regreso a sus países de origen.
ESTUDIANTES SE REUNIERON EN NUEVO MÉXICO
En tanto, unos 200 activistas estudiantiles inmigrantes procedentes de todo Estados Unidos llegaron a Albuquerque la semana antepasada para elaborar estrategias para responder a las políticas de inmigración del presidente Donald Trump.
Los activistas se reunieron en una serie de entrenamientos y talleres dirigidos a protestar el incremento de los arrestos y otras medidas de inmigración bajo Trump, entre ellos el DACA.
Desde que Trump llegó a la presidencia, las autoridades de inmigración han endurecido la aplicación de las leyes de inmigración.